Convoquemos a la Plaza de las banderas por la humildad

Los seres humanos tenemos valores y cualidades que cuando son expuestas a la vida en convivencia social dan a entender  y/o demostrar a los demás el grado de sensibilidad o compromiso que todos tenemos.  Una de esas cualidades  o virtud intrinca del ser humano lo es  la humildad.

Ser humilde es conocer sus capacidades y limitaciones, es una virtud moral que todos ser humano que la ejerce tiene antes los demás.

Tras el informe dado por la Organización Estados Americanos (OEA), donde este dice que no hubo sabotaje, ni fraude ni elementos externo en la crisis de la pasada elecciones municipales llamada a celebrarse en febrero pasado, que trajo consigo la suspensión de la misma, y que posteriormente fueron celebrada en marzo 15, donde dicho informe plantea que fueron acciones erróneas al protocolo de parte del centro de cómputos de la Junta Central Electoral (JCE)  que originaron que el voto automatizado no funcionara debidamente, todos aquellos que, de una u otra manera juzgado a personas, organizaciones o al gobierno, debemos hoy, humildemente, de convocar a la Plaza de las Banderas a pedir disculpas.

Yo, de manera personal, entiendo que seré el primero en estar allí para humildemente pedir disculpa al técnico de Claro y al coronel envuelto en  los rumores e indicios que ellos mismo dieron sobre la posibilidad de un sabotaje a la Junta. Pero así mismo los que allí se presentaron noches y días, deben ser humilde hoy y pedirle disculpa pública, quizás a Leonel Fernández, porque allí mencionaron su nombre, pero sobre todo, al más perjudicado,  al gobierno, al PLD, a Danilo Medina.

Humildemente todos debemos hoy, periodistas de la oposición, principales promotores de los ataques al gobierno, partidos opositores y demás hierbas aromáticas, deben ir a la plaza de las banderas a pedir disculpa pública al presidente Medina, a su gestión administrativa por lo despiadado comentarios y por lo desgarradoramente que fue difamado.  Al Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que fue cuestionamos por ser el partido de gobierno por sectores contrario buscando alcanzar su nivel. Ellos no fueron culpables. Este informe consagra, al dejar el presidente Medina las investigaciones internas y dar paso a la OEA, como un estadista que busca el mejor bienestar de su nación a través de una constantes participación democrática.

Hoy, así como ayer protestamos y acusábamos al PLD de realizar un fraude, debemos ir humildemente a la Plaza de las Banderas a pedir disculpa. Hoy mas que ayer, debemos ser sincero y decirle a lo nuestro que estábamos equivocados y aunque no remediemos el daño hecho, sintamos más liviano. 

Hidalgo Rocha Reyes