Egipto en su "Día D": Por un gobierno democrático.

Una marcha similar también está convocada en Alejandría y no se descartan manifestaciones multitudinarias en otras ciudades, especialmente luego de que el ejército anunciara que no piensa usar la fuerza en contra los manifestantes por considerar "legítimas" las "demandas del pueblo".
Este anuncio puede resultar fundamental pues sugiere que Mubarak ya no cuenta con el apoyo incondicional de los militares y elimina gran parte del temor que podrían tener algunos de los manifestantes.

Mubarak puede prometer retirarse de forma gradual, prometiendo no presentarse a las elecciones presidenciales previstas para septiembre de este año, o incluso dimitir inmediatamente en favor de alguno de los actuales miembros de su gabinete.

Por lo pronto, el nuevo ministro de Finanzas de Egipto, Samir Radwan, le dijo que él estaba recibiendo sus órdenes de manos del vicepresidente (Suleiman) y del Primer Ministro (Ahmed Shafiq).

Pero Suleiman, quien anteriormente se desempeñaba como jefe de los servicios de Inteligencia de Mubarak, no es una figura popular entre los manifestantes. Y, con más de 70 años, la edad es un factor en su contra.
Esto significa que su nombramiento, de producirse, no pondría necesariamente fin a las protestas.
Esta opción garantizaría la sobrevivencia de parte del actual sistema en el poder, pero no la del presidente y sus socios más cercanos.
Probablemente es lo que la secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, tenía en mente cuando invitó al gobierno de Egipto a garantizar "una transición ordenada".

Pero no está claro el nivel de apoyo que El Baradei tendría por parte de los Hermanos Musulmanes, organización islamista que en cualquier elección libre y justa aspiraría a obtener gran parte de los votos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario