Benny Rodríguez
Barahona.- Un joven en estado de embriaguez que acudió a la nueva emergencia del hospital Regional Universitario Jaime Mota la madrugada del pasado sábado a acompañar a un amigo suyo, rompió el cristal de la puerta de acceso del centro médico de salud local.
De acuerdo a informaciones obtenidas se trata de Pascual Cuevas Peña, de 22 años, residente en el barrio Palmarito, quien de inmediato fue apresado por la seguridad del interna del hospital Regional Universitario Jaime Mota, así como por el agente den la policía depuestos en el centro de salud del Estado.
Una fuente del hospital que ofreció la información a cambio de que hagamos reserva de su nombre, confirmó que la dirección del centro de salud estatal que atiende las urgencias médicas de las provincias de Pedernales, Barahona, Bahoruco e Independencia, se querelló contra el joven de 22 años, a quien le fue impuesta tres meses de prisión preventiva como medida de coerción.
La inauguración de la nueva emergencia, inaugurada a principio de este mes, por valor de 100 millones de pesos, se obligó a que el joven Cuevas Peña pague el cristal de la puerta, el cual ya está en el hospital, el cual salió por la suma de más de 4 mil pesos.
La fuente que ofreció la información dijo que el muchacho llegó como poseído del “demonio” hasta la emergencia del centro de salud acompañado a otra persona a quien, pensó no le ponían caso y reaccionó de una forma violenta, el que atribuyen a su estado de embriaguez.
Falta de seguridad
El personal médico y de enfermería que labora en la emergencia del hospital Regional Universitario Jaime Mota, adolece de serios problemas de seguridad, no solo para los facultativos y las norsas, sino para los pacientes que van allí hasta en busca de curar sus dolencias médicas.
Este reportero trató de comunicarse con la dirección del hospital, que está bajo los hombros del doctor Gilberto Suero Caballo, para entrevistarlo al respeto, pero no fue posible el contacto con él.
Se recuerda que en el hospital Regional Universitario Jaime Mota han ocurrido otros eventos de inseguridad para el personal médico y de enfermería, como, por ejemplo, el asesinato de otro agente por parte de un oficial policial, a quien le fue impuesta una condena de 30 años.
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