Los sectores más preocupados y responsables de la sociedad deben colocar esta problemática en prioridad en la agenda nacional para aunar esfuerzos y contribuír a que la juventud no sea mal orientada por los oscuros y falsos caminos y todos prestemos el mayor aporte unificado para formular planes que orienten a tantos jóvenes a que sus esfuerzos y energías son mejor aprovechados en actividades productivas y fecundas que fortalecerán su desarrollo y se conviertan en personas de bien para beneficio de ellos mismos, sus familias y toda la población.
Aumenta
r la cantiddad de centros educativos de diversidad formativa, establecer áreas de deporte en los diferentes sectores en que puedan practicar disciplinas deportivas, para su salud mental y física. Instalación de bibliotecas públicas para el crecimiento del conocimiento y el avance científico, comedores económicos en los barrios en que puedan adquirír sus alimentos a buenos precios. Academias musicales y artísticas que se inclinen a nuevas profesiones y el desarrollo de las potenciales intelectuales. Clubes culturales de socialización y proyección comunitaria y que a la vez serán vigilantes de sus propias actividades sociales, garantizando sus vidas y mantenerse lejos del peligro.
Charlas variadas, centros de salud y buenos ejemplos institucionales y de adultos para que los jóvenes observen que el mayor valor de la vida es la dignidad, vivír en paz y en desarrollo y manteniendo relaciones buenas entre todos los miembros de la comunidad.
Demosle la oportunidad a la juventud, señalemos la buena ruta del bien y capacitarlos para ser seres de bien común y tener siempre presente el valor sagrado a la patria. Enseñarles valores positivos y sanos.
Hablemos siempre de salvar a nuestros jóvenes, prestarle y extenderle nuestros manos amigas y sinceras para que ellos crezcan y la patria verlos triunfando en los diferentes eventos como tenemos tantos buenos jóvenes ejemplos y que son orgullo nacional.
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