
Para el director de la Policía Nacional, Ney Aldryn Bautista Almonte, la conducta, tanto de los civiles como de los comandantes encargados de las unidades policiales, es inaceptable, debido a que les baja la moral a los subalternos “que ven como un carajo viene a mentarle a su madre”.
El oficial va más allá y visiblemente alterado expresa que él, personalmente, no acepta ese tipo de atropello. Entiende que esas personas, que irrespetan a los policías que están haciendo su trabajo, “arriesgando su vida”, lo que merecen en que “lo estrellen en el piso, lo esposen y los metan a la cárcel”.
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