Santo Domingo.- Lentamente y si detalles públicos avanzan las investigaciones para esclarecer los hechos delictivos en los que han muerto este mes cinco miembros de las instituciones armadas, incluido un oficial de la policía que fue ejecutado frente a una escuela.
A tiros han caído tres agentes policiales, uno del Ejército y otro de la Fuerza Aérea desde el pasado 1 de diciembre hasta la fecha.
El más reciente fue el teniente del Ejército, Gregorio Ramírez Pineda, abatido por desconocidos en la avenida 6 de noviembre en San Cristóbal este martes.
El pasado lunes el teniente de la Policía Ramón Antonio Cabrera Ferrer asesinado en el momento en que recogía a sus dos hijos en un centro educativo del sector María Auxiliadora.
El pasado martes 3 de diciembre fue hallado con signos de violencia y herida de bala el cuerpo de Luis Alberto Disla Turbí, miembro de la Dirección de Investigaciones Criminales de la Policía en Sánchez, Samaná.
El día anterior, al capitán de la Fuerza Aérea Tomás Méndez en Villa Liberación Santo Domingo Este, en un intento de robo.
“Podremos tener una información en torno a las investigaciones, tenemos personas de alto interés para las investigaciones a las cuales le estamos dando seguimiento”, dijo Diego Pesqueira, vocero de la Policía Nacional.
El primero de diciembre en un confuso incidente en Barahona, cayó a tiros el vocero de la policía en San Juan, Meregildo Espinosa Segura.
“Hay que tomar medidas de desarme, macro personal, de organización, establecimiento de domicilio, identificación de las personas. Hay una criminalidad organizada con relación al narcotráfico que deja la secuela”, sostuvo el abogado, Félix Damián Olivares.
Ninguno de los oficiales tiroteados trabaja en el momento de la muerte.
Los familiares de los oficiales caídos esperan una respuesta de las autoridades.
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