Durante la pasada campaña electoral una tarde recibí la llamada de un importante amigo funcionario y dirigente PRMeista en ésta provincia de Barahona, del que por razones éticas no divulgo su nombre. Quien me hiciera una propuesta tentadora, a la que sin titubeo alguno respondí con una negativa, al entender que, luego yo carecería de calidad moral para criticar a otros que, a diferencia mía flaquearon ante la embestida del gobierno.
Sin dudas que con aquella oferta podía mejorar significativamente mis ingresos económicos así como la de mi familia, sin embargo entendí que, tanto la coherencia como la dignidad de una persona no deben ser puestas a rodar. Toda vez que, con el paso del tiempo y como ha ocurrido con ciertas figuras dentro del ámbito político barahonero, de igual manera sería señalado y cuestionado por el mismo dirigente PRMeista que en la citada ocasión ocasión sirviera como enlace para la adquisición de mí persona, como instrumento político en dicho proceso electoral.
Aquellos que no fueron capaces de resistir la tentación de las ofertas provenientes del gobierno PRMeista, hoy están siendo objeto de severas criticas desde distintos litorales. Unos por su otrora "dura" posición de críticos contra el actual gobierno, los que hoy no tienen más formas de justificar su cambio de posición en su ideas, que no sea ambición de dinero y la falta de coherencia y firmeza. En tanto que otros son cuestionados por sus anteriores correligionarios, en razón de que, a los que cruzaron la cerca, aún no se le ha cumplido las promesas que le hicieran y que los indujeron a traicionar sus anteriores posiciones políticas .
Cuando alguien que a través de los diferentes medios comunicativos, en tiempos anteriores haya manifestado duros cuestionamientos contra éste gobierno, no habría lógica para que utilizando ésos mismos medios luego aparezca alabando a quien antes calificó como inmoral o poco ético, por el hecho de recibir un nombramiento, una suma de dinero o una contrata del gobierno al cual descalifiqué para dirigir el país. Por tal razón he preferido ser calificado de "ROMÁNTICO POLÍTICO" por unos y como tonto escrito con"P" por otros ciudadanos. Lo cierto es que, probablemente con mi actitud haya sido una u otra cosa, sin lugar a dudas hoy puedo con toda propiedad y sin temor alguno, expresar mis criterios críticos respecto a las consistentes ineficiencias y fallas del presente gobierno.
En conclusión quiero resaltar que, el romántico o tonto político escrito con "P" que escribe, aunque sólo sobreviva dentro de la situación que padece nuestro país, duerme con la conciencia tranquila, además de que puede transitar las calles de Barahona y todo el territorio nacional con la frente en alto.
Y ESO NO TIENE PRECIO!!
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