El empresario discográfico Bienvenido Rodríguez tiene un largo historial de litis, pleitos, demandas, conflictos, luchas, arrebatos, bamboleos, con todos los artistas que han pasado por sus manos.
Estos se puede analizar con mayores detalles hechos históricos que para otros son referenciales pues sabe de él desde su inicio en el mundo empresarial y discográfico en los albores de losaños 70 en que era apenas un humilde buhonero de la avenida Duarte con Teniente Amado García Guerrero, según consta en su libro Historia del Arte Popular Dominicano, cuya prueba he tenido el honor y el privilegio de haber podido leer antes de ir a imprenta.
Estos se puede analizar con mayores detalles hechos históricos que para otros son referenciales pues sabe de él desde su inicio en el mundo empresarial y discográfico en los albores de losaños 70 en que era apenas un humilde buhonero de la avenida Duarte con Teniente Amado García Guerrero, según consta en su libro Historia del Arte Popular Dominicano, cuya prueba he tenido el honor y el privilegio de haber podido leer antes de ir a imprenta.
Ningún artista que ha sido de Karen Récords ha salido incólume, impoluto, de esa empresa, sin antes librar una larga batalla para obtener el "release" o que se le reconozcan sus derechos, lo que si sacamos cuenta, se puede comprobar en el caso de Wilfrido Vargas, Rubby Pérez, The New York Band y Chery Jiménez, Los Hermanos Rosario, Ramón Orlando, Maridalia Hernández, y ahora con el ilustre Juan Luis Guerra, al que ni siquiera su creencia en la fe cristiana, a la que el señor Rodríguez dice haberse abrazado (por conveniencia?) , le libra de la vorágine y la voracidad, de esa máquina humana de hacer dinero a como dé lugar que ha sido siempre el señor de la Z y ello lo saben muy bien sus acólicos y sus empleados, como el señor Euri Cabral, que muy bien le conoce, desde aquellos tiempos en que éramos vecinos puerta con puerta, en el edificio de oficinas donde estaba Karen Récords en la ciudad de Miami.
La historia de la novela entra ahora en el increíble capítulo en que Bienvenido Rodríguez está demandando a Juan Luis Guerra por la astronómica suma de un millón de dólares, bajo el alegato de que cuando este tenía su canal Mango TV en el edificio que compartían de la avenida 27 de Febrero, mantenía conectados dos potentes unidades de aire acondicionado al servicio de energía de la emisora La Z de su propiedad.
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BIENVENIDO RODIRGUEZ |
Probablemente como ambos eran dueños del edificio donde estába Mango, y está La Z, compartían el servicio de energía, que ahora el avispado disquero y radiodifusor reclama por la vía legal.
Tonto sería el que se deje llevar por las apariencias, de lo que hay envuelto y está de por medio.
Porque a simple vista se puede observar que la demanda de Bienvenido es en respuesta a otra que le interpuso Juan Luis y que se trata de una de las clásicas artimañas, forzando una chicana, de las que acostumbra el empresario a articular cada vez que entra en conflicto con alguien, procurando tocerle el brazo o forzar una negociación, donde por supuesto salga ganando.
Cuando Juan Luis hizo la mudanza de su canal Mango del edificio que compartía con la emisora La Z, Bienvenido se apoderó del local de manera antojadiza, provocando que el artista iniciara acciones judiciales para recuperarlo.
Al no tener asidero que sustenten su apropiación es muy probable que, como se espera, se vea obligado por la justicia a devolver el local usurpado.
De ahí que haya interpuesto una contrademanda contra Juan Luis acusándolo de robo de luz, cuando Mango TV estuvo en el eficio que ambos compraron.
Claro, se dio cuenta ahora. No antes. Merengala
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